Ahora si sabemos que sienten lo astronautas cuando llegan a la luna, hemos visto un paisaje que se puede describir como “LUNAR”
La llegada a la Capadocia fue sorprendente, en el medio de una gran estepa se abre la tierra en dos y emergen cientos de torres de piedra que están agrupadas en diferentes montículos a lo largo del valle, hoy en día se puede apreciar que muchos de ello tienen forma de queso Gruyere, ya que Vilma, Pedro y todos sus colegas pasaron una temporada por aquí y el resultado fue, casas de dos y tres plantas dentro de esos montículos de piedras.
Pero la sorpresa continúa cuando te enteras que en el mismo valle
se encuentran varios pueblos subterráneos, nosotros decidimos visitar uno de ellos el cual tiene 7 pisos de profundidad en forma de laberintos. después de pagar las 15 liras de la entrada comenzamos a descender cuando se nos acerco Safir conocido como el pequeño veloz guía local ,después de un breve regateo nos pusimos de acuerdo , Safir nos guío através del tiempo y esta espectacular ciudad subterránea ,con un castellano bastante fluido nos contó que los Hititas fueron lo pioneros de esta construcción en el año
Despedirse de un lugar así es muy difícil ya que en todo momento estas dentro del decorado, pero si, nos tuvimos que marchar. En dirección sureste poco a poco nos fuimos metiendo en las áridas montañas del Kurdistán turco, y hoy nos encontramos en plena fiesta musulmana en el corazón kurdo en un pueblo de no mas de 100 casas (Savur), Comiendo cordero, en un castillo medieval.
Mañana nos esperan los 430 kilómetros que nos separan de Irán, si todo sigue igual de bien que hasta el momento el viernes después de cruzar el paso fronterizo de Esendere (Turquía) y Isgeh su (Irán) estaremos pisando tierras persas…